Quiero desgarrar esta vena que esta llena de muchos sentimientos.

martes, 30 de julio de 2013

Primera Carta De Amor


 
 
 
 
 
Hola mi amor, tal vez no esperes estas palabras de esta lunática. Ya que lo soy, estoy loca por ti. Mi locura es tu ciencia y tu presencia es mi felicidad. Soy buena escribiendo cartas, pero no simplemente cartas. Cartas que vayan al alma y corazón. Por primera vez escribiré una ya que debo decirte en mis propias palabras lo que siento por vos. Siento cosas nuevas y no tan nuevas en mi corazón, como las mariposas, el cosquilleo en mi piel, esa sudoración que me nacen en las manos y sobretodo esa palpitación anormal que tengo desde que me dijiste: “hola, necesitas ayuda con el trabajo”. Quien diría que al chico que yo miraba llegar tarde a cierta clase de enfermería fuera que me robara el corazón. Un chico que pusiera mi mundo de cabezas y mi futuro indefinido, ya que todo se ha vuelto de dos y no de yo…yo… yo. Bueno como siempre había sido en mis mil vidas vividas y jamás contadas. Eres lo primero que pienso cuando despierto y lo último antes de dormir. Eres el único que deseo que se apodere de mis labios una y otra vez, que me domine con la mirada con una leve sonrisa coqueta y el que me tome de la cintura y susurre en mi oído “ eres mía y no pienso dejarte escapar mi Reyna”. Quiero que seas más que mi novio y no tienes la menor idea de lo que he tenido que lidiar. He tenido que lucha contra mis perjuicios, miedos y los problemas para desear ser más que una simple novia. Todas las canciones de amor que rondan en mi cabeza me recuerdan a ti y eso es uno de los síntomas de que te amo. Si, te amo y no me importa demostrarlo. Porque demostrarlo es liberar esa droga que mi consume el corazón y me hace sentir tres metros sobre el cielo. Porque así me siento desde que me confesaste que me amabas, debo aceptar que no hace más de un mes que creo a ciegas esa afirmación. Porque ambos sabemos que esto no fue algo planeado, dialogado y quizás meditado. Solo pasó y hemos sobrepasado los límites de muchas situaciones fuertes para ambos. Solo eso me da fuerza para seguir adelante en esta relación y no pretendo demostrar que todo es un cuento de hada, pero se tienes sus fallas. Porque habido veces que he querido dejar todo y seguir con mi vida de manera narcisista y solitaria. Pero verme aquí fiel a ti y tú a mí, como muchas veces soñé y desee con el corazón. Los dos somos polos opuestos, fuego y hielo, pero intentamos ser parte del uno de cualquier manera. Si no lo sabias te diré la verdad que me mata, te amo y no lo puedo negar. La primera vez que lo dije no me creí y cuando lo dijiste tu tampoco que me hice a la idea. ¿Cómo alguien como tu podría amar alguien como yo?, aun no se la respuesta y no quiero buscarle la vuelta como muchas veces lo hice en noches interminables. Sabías que cuando peleamos al teléfono y yo cuelgo, es porque no quiero que sientas mi dolor ni me escuches llorar. No es que sea cobarde, pero mi orgullo me lo impide y no deseo que me veas vulnerable ni débil. Tampoco quiero verme a mí misma como tal y eso es algo que jamás podre permitir. El día que me veas así es porque mi dolor es mayor que mi orgullo y no pienso más que sacar el dolor de ese lugar. Junto a ti aprendí a tener paciencia, más que de la que tenía, aprendí a ser paciente, aprendí ser persistente y no rendirme. Sobretodo aprendí a amar sin recibir nada a cambio. Amar sin saber que todo resultaría como historia de amor verdadera. Te amo, amo tus defectos, amo lo que tu ama y amo hasta tú aliento después de besarme. TE AMO no dice todo lo que siento porque quedaría muy grande para esa palabra. Tal vez leas y esto y no comprendas ni una sola palabra y no quiero ni pensar que vas a pensar. Porque no me quiero ilusionar y tampoco decepcionarme por tu ignorancia masculina. Me conformo que lo sepas. Que comprendas que esto es serio para mi aunque al principio pensé que jugaría y no sería siendo perdedora en el juego de este amor. Un amor que llego como huracán rompiendo los rastros de otro amor, dando pasa luego de la tormenta y transformándome en otra persona. Porque creas o no yo he cambiado de tal manera que nadie me reconoce ni yo misma. Siento que no soy tan niña ni tan malcriada, sino como una mujer. Tampoco la mujer que nadie tiene o quiere tener, si no la mujer que le pertenece a un hombre en corazón, pero no en cuerpo y mucho menos alma porque no tengo. Quiero unir mi vida a la tuya aunque tenga miedo que este amor se evapore o simplemente creas que tu corazón tiene otra dueña y esa no sea yo. Por eso aprovecho todo ya que estoy tres metros sobre el cielo y tal vez caiga al suelo. La caída me dejara destrozada y herida, tal vez de esta no me recupere. Quiero amarte y ser amada, es solo lo que pido. No es mucho pedir y más humilde no puedo ser mi amado.

E.

No hay comentarios:

Publicar un comentario