Espero que cuando leas esto comprendas más de lo que
ya te he dicho los últimos meses, tal vez no soy totalmente franca y
simplemente no lo deseo. Ambos hemos sufrido por mi decisión y creo que puedo
decir que te he superado al 80%. Me refiero a que ya no te siento como antes,
te siento como un amigo de pasado, uno del cual no podré olvidar, pero no podre
a tener a mi lado. Deseo agradecerte por darme un chance en la vida porque evitaste que me privara de ella cuando yo
deseaba hacerlo. Te preguntaras porque te escribo ahora si prometí hacerlo el
otoño pasado. Lo hago por que deseo hacerlo, sería como sacar un veneno de una
arteria que daña mi corazón. Creo que tenías razón cuando dijiste que podría
volver amar. Porque realmente estoy amando, pero no como antes. Cuando comencé
amarte lo hice con total confianza tanto que te trataba como un invitado a mi
vida, pero que después del 1er año de relación te comencé aceptar de verdad.
Ame sabiendo los riesgo y con sed de lucha. Porque tú
sabes que soy terca, pero cuando mi mente dice que “NO”. Es “no” para toda la
vida y eso lo sabes de sobra. Debo decirte ¡Gracias!
¿Por qué?... dios mío me enamore de ti cuando nunca creí
hacerlo, sufrí y pude superarlo, pero con buenas experiencia. Porque aprendí a
vivir y que hay más allá de la misma muerte, la agonía y la melancolía que yo
misma me había puesto. Aprendí del dolor del amor y saboree cada etapa de un
noviazgo.
Fuiste el primer chico que me amo de verdad y que
seguirá haciéndolo hasta el fin de los tiempos. Eso te lo agradezco también porque
siempre sabré que fui y ser amada de manera excepcional y perfecta. Solo a ti
te mostré cada parte de mí sin importar lo bueno y lo malo, lo hice sin miedo y
sin vergüenza. Sentí paz haciéndolo porque era ser yo de verdad y no la que yo
suelo ser comúnmente con la gente. Todo lo que era, lo que soy y lo que un día seré
y aún no está escrito lo sabes tú mi querido. Te escribo esto para despedirme
de ti con sinceridad y paz. Porque no sé qué suceda en mi vida y no quiero
saberlo. Ya no quiero hacer planes ni metas solo quiero vivir como prometimos.
¿Lo recuerdas? Carpe diem. Ese es nuestro lema, nuestra biblia y simplemente es
todo para nosotros.
Tal vez cuando leas esto sientas muchos sentimientos
y te llenes de dudas, las cuales no responderé como ya imaginaras. Solo te
deseo lo mejor, que vuelvas amar, que tengas lo que una vez quisimos y sigas
siendo mi mejor amigo. Sé que es mucho pedir, pero es lo correcto. Lo sé porque
lo hago todos los días y no te puedo negar que no es difícil. Claro que lo es,
pero un día te despertaras y te sentirás bien consigo mismo. Cuídate y sigue
tus sueños mi Pingüino que yo seguiré los míos con tropiezo, lagrimas, pero con
el orgullo de mi lado.
Ps. Yo también… así debería comenzar, pero no.
Prometí jamás decirlo y cada día matar ese sentimiento hasta dominarlo por
completo para sí ser feliz. No me olvides porque yo no podre jamás olvidarte
aunque no estés a mi lado.
Elenatrix
Marie Prince
No hay comentarios:
Publicar un comentario